La compañía automovilística Ford ya tiene espacio propio en el Puerto de Valencia. Después de pasar décadas haciendo uso bajo autorización administrativa de 50.000 metros cuadrados en el extremo sur del Muelle del Este, el Boletín Oficial del Estado recogía este martes el anuncio de la Autoridad Portuaria de Valencia por el que le otorgaba la concesión de este espacio. La medida no amplía la superficie sobre la que la empresa hace negocio, pero sí la compromete de forma mucho más intensa que hasta ahora con una continuidad de la actividad.
Concretamente, Ford España asume el compromiso de un tráfico medio mínimo durante los próximos siete años (prorrogable tres años más) de 90.000 vehículos anuales. Teniendo en cuenta que las previsiones de la firma en Almussafes para los próximos años pasan por superar las 400.000 unidades anuales, en torno a uno de cada cuatro vehículos producidos en la planta valenciana saldrán por la infraestructura portuaria.
Además, la adjudicación de una terminal propia significa un cambio sustancial en la estrategia logística de la compañía, ya que desde 1976 el método elegido era solicitar prórrogas de la autorización cada tres años. Además, Ford España posdrá realizará ahora inversiones en función de sus necesidades.
En todo caso, la petición de la concesión de la terminal en el Puerto de Valencia confirma el objetivo de mover un total de 190.000 vehículos al año. Para ello, a finales de 2014, Noatum Terminal Polivalente Sagunto anunció un acuerdo mediante el cual Ford España se comprometía a exportar 100.000 vehículos desde Sagunto. Si se junta este compromiso con el solicitado en el Puerto de Valencia, el volumen mínimo de tráfico de automóviles de Ford superaría las 290.000 unidades.
Y es que, la inclinación de la empresa hacia la instalación portuaria valenciana no se quiere limitar a la superficie recién concedida. De hecho, actualmente tiene en tramitación su solicitud para hacer uso de 100.000 metros cuadrados en el muelle Norte (aunque explota la misma extensión en Sagunto), próximo al que actualmente utiliza y dedicado hasta ahora a graneles.
Este fortalecimiento de los vínculos entre Ford Almussafes y el Puerto de Valencia va en sintonía con el impulso que ha experimentado la planta valenciana y el consumo mundial de automóviles por la mejora económica, además de por la flexibilización y abataramiento del crédito.
Buena racha
De hecho, Ford ha vendido en febrero 91.700 vehículos en el mercado europeo, lo que representa un 18% más que el año pasado y registra las mejores ventas de la compañía en este mes desde 2010. De hecho, la cantidad supera el crecimiento de la industria automovilística en un 14%, con lo que también ha incrementado su cuota de mercado en 0,3 puntos hasta llegar al 7,5%.
Actualmente, Ford produce en Almussafes seis modelos. El más veteranos es el Kuga, que empezó a producirse en 2012 y que mantiene desde el siguiente ejercicio un ritmo de producción de más de 102.000 unidades. La Ford Connect empezó a salir de la cadena de montaje valenciana en 2013 y un año más tarde le siguió el Mondeo.
Sin embargo, ha sido 2015 el año del mayor salto cualitativo de la firma. Y es que en ese ejercicio se ha terminado de completar el proceso de renovación de la factoría y ha empezado a producir algunos de los modelos de mayor valor añadido de los que cuenta la firma del óvalo: los modelos Vignale, Galaxy y S-Max.
Por otra parte, hace unas semanas que la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración de Territorio ponía de su parte con la inversión de más de 650.000 euros en obras de mejoras en los accesos de la factoría Ford en Almussafes y en los accesos al polígono industrial de El Romaní. Esta última actuación busca mejorar la seguridad vial en una zona por la que pasan a diario miles de vehículos debido a que forman el mayor polígono industrial de la comarca.